Por Juan Bergelín
Tras la incursión de Mercado Pago en el mundo de los Fondos Comunes de Inversión (FCI), otra fintech de fuerte presencia en el mercado comenzó a ofrecer estos productos entre sus clientes.
Se trata de Ualá, fundada y timoneada por Pierpaolo Barbieri, que sumó esta alternativa orientada a un público cada vez más acostumbrado a que las firmas “4.0” le hagan rendir sus pesos sin tener que inmovilizarlos en un plazo fijo. En su plan de diferenciarse de la banca tradicional y para sumar clientes, la mayoría de los bancos digitales paga una tasa de interés por el saldo en cuentas a la vista y varios de ellos avanzan en su estrategia de ofrecer fondos comunes.
Pero el lanzamiento de los FCI en su plataforma no es el único frente de batalla que Barbieri abrió contra la empresa de Marcos Galperín: cada vez que puede, el joven empresario muestra su disconformidad por la negativa de Mercado Pago a habilitar las transferencias de dinero desde ese sitio a Ualá.
“Depende de ellos. Pediles que lo hagan”, señala, y redobla su apuesta disparando esta frase: ” Mercado Pago, hagamos un mercado más libre”. Consultada por iProUP, la fintech que depende del gigante del ecommerce asegura que es cuestión de tiempo para que esa operatoria que tanto reclama Ualá quede habilitada.
“Estamos trabajando y una de nuestras prioridades es finalizar ese desarrollo, para que así haya interoperabilidad entre las billeteras virtuales. En las próximas semanas ya lo estaremos disponibilizando para los usuarios, aunque por etapas”, aseguran.
Como defensa, desde la bigtech comandada por Galperin destacan que la integración de Mercado Pago para vincular cualquier plataforma siempre estuvo disponible. “Así lo hizo Ripio, por ejemplo, la plataforma de monedas virtuales, para que se pueda pagar con Mercado Pago“, ejemplifican.
“En realidad, no hay interoperabilidad de CVU”, disparan en el sector fintech. “Si bien Mercado Pago recibe transferencias inmediatas de los bancos, desde Mercado Pago hacia los bancos todavía no hay transferencias inmediatas”, agregan.
En rigor, es algo que tiene que ver con los mecanismos de información entre ambos actores. “Hace meses que el BCRA emitió la norma. Así como Mercado Pago ya está habilitada para recibir, ellos tienen que validar con COELSA (la cámara compensadora) el intercambio de mensajería para lograr que sus transferencias también sean instantáneas”, comenta a iProUP una alta fuente que sigue de cerca la operatoria.
En la City aseguran que la firma de Galperín aún enfrenta inconvenientes con COELSA para direccionar las transferencias. Y su argumento es que el problema es de los bancos, que no logran concretar el traslado de fondos. “Le prometieron al Central que para fin de julio lo iban a tener operativo y después tuvieron que pedir prórroga”, sostiene las fuentes.
Fondos comunes para todos
Mientras da batalla en este frente y expone en las redes las trabas de Mercado Pago para efectuar transferencias, Ualá incursionó en el mundo de los FCI, instrumento que Galperín logró llevar a un público que nunca antes había tenido una cuenta comitente.
“Con sus pros y contras, Mercado Pago hizo popular, por decirlo de algún modo, a los Fondos Comunes de Inversión. Igual hay que ver cuántos de sus clientes leyeron la letra chica y sabían de qué se trataba cuando les prometían una rentabilidad por sus saldos”, comentan en la City.
Entre las ventajas aparece claramente la “democratización del ahorro y la inversión”, como definen dentro de Mercado Pago, bajo el argumento de que llegaron a duplicar el total de personas que invertía en esta herramienta. Del lado de los contras, figura la apuesta por activos financieros (títulos públicos) atados a la evolución de los mercados que pueden llevar esta apuesta a terreno negativo.
“La rentabilidad promedio del Fondo está atada a los activos que lo componen y se calcula en función de los últimos 30 días. En la actualidad es del 48%”, informan desde la firma de Galperín.
En tanto, el propuesto por Ualá (en estado de prueba cerrada para 10.000 usuarios), permite canalizar desde $1, sin tope máximo y a un costo del 2%. En breve estará disponible para sus 1,2 millones de usuarios. Su nombre es SBS Ahorro Pesos FCI y la tasa de rendimiento ronda el 45%. “Invertirá únicamente en depósitos a plazo fijo, cauciones, fondos de money market y cuentas remuneradas”, y desde la firma aclaran que “no tendrá exposición en activos con riesgo precio de mercado”.
La visión de los bancos digitales
La política de Barbieri y de Galperin de ofrecerles a sus usuarios la posibilidad de hacerles rendir el dinero que mantienen como saldo en sus cuentas va en línea con la estrategia de la mayoría de los bancos digitales. Pero, a diferencia de las fintech, éstos toman depósitos y por eso mismo están regulados por el BCRA.
En rigor, de los tres digitales que hay en el país, Wilobank y Rebanking brindan desde el primer día un rendimiento por los fondos que sus clientes dejan en dichas cuentas. Fue una estrategia de marketing pensada para darle pelea a la banca tradicional y que llegó para quedarse.
Como contrapartida, Brubank nunca estuvo interesado en avanzar en esta dirección, e intenta hacer la diferencia proponiendo una buena cotización en la venta de dólares. Y en el caso de Naranja digital –que salió al mercado hace algunos meses–, por ahora apunta a brindar seguro gratis en teléfonos celulares y a la recarga de la SUBE.
“Lanzamos Wilobank con la propuesta de remunerar los saldos en caja de ahorro”, afirma a iProUP Guillermo Francos, presidente de la entidad virtual que ya tiene más de 73.000 cuentas abiertas. “Al principio, la diferencia entre la tasa de la caja de ahorro y la del plazo fijo no era grande, más o menos la mitad. Luego subió mucho la del plazo fijo”, agrega.
Cuando Wilobank salió a competir, el retorno por saldo en cajas de ahorro era del 20% anual y el rendimiento de los depósitos en el mercado rondaba el 44%. Hoy, el banco de Eduardo Eurnekian que comanda Francos paga entre 20% y 25% sobre el dinero a la vista y cerca del 64% anual por una colocación.
Según detalla Francos, al ampliarse la brecha entre ambos tipos de interés fue ganando terreno la porción de plazos fijos dentro del total de depósitos, que hoy ya representa dos tercios de los fondos.
Lo que viene
Respecto a la posibilidad de comenzar a ofrecer FCI, como Ualá y Mercado Pago, Francos señala que han conversado con muchas administradoras de fondos, pero que el proyecto es para más adelante. El ex director del Banco Provincia reconoce que “ahora nos hemos concentrado en ir mejorando la plataforma y estamos dedicando recursos a este objetivo”.
“Lo tenemos en carpeta y hemos hablado con no sólo con administradoras sino también con aseguradoras, como para generar alguna API de conexión con ellos para ofrecer sus productos”, adelanta Francos, ya que dentro del roadmap del banco también está la idea de vender seguros.
La entidad digital del grupo Transatlántica, Rebanking, también desde su lanzamiento optó por hacer rendir los pesos de las cajas de ahorro, marcando una diferencia concreta con sus contrapartes tradicionales que sólo abonan una tasa de interés por los plazos fijos.
“La respuesta del público es muy positiva, ya que no está acostumbrada a que el dinero a la vista le genere intereses”, dice a iProUP Stefano Angeli, CEO de Rebanking. Y agrega: “Está bueno que los nuevos jugadores del mercado lo empiecen a ofrecer para educar al sistema sobre estos nuevos servicios”.
En la entidad, hoy en día pagan una 30% anual, que se calcula en base a los promedios diarios del mes y se acredita el primer día hábil del mes siguiente.
“Venimos muy bien en apertura de cuentas, el número creció 126% el último mes y estamos superando las expectativas”, comenta el directivo, quien tenía como meta llegar a los 50.000 clientes antes de diciembre, objetivo que podrían cumplimentarse antes. Angeli se mete en una interna con Mercado Pago y destaca las bondades de la caja de ahorro remunerada respecto a los fondos comunes. “La nuestra es mejor, ya que la tasa no es variable, como sí lo es en los FCI”, señala.
“Eso le pasó a Mercado Pago, cuando bajó la cotización de los bonos y tuvo mucha volatilidad el rendimiento del dinero colocado,” agrega Angeli. “En nuestro caso, la tasa está asegurada y es siempre fija”, compara.
Con todo, cada vez es más común que las fintech y los bancos digitales hagan rendir los pesos que sus clientes tienen en sus cuentas y –como dice Angeli– quizá en algún momento terminen “educando” al resto del sistema.